Imágenes de Abuso Sexual Infantil
Descripción general
La legislación federal de Estados Unidos define la pornografía infantil como toda representación visual de conducta sexualmente explícita que involucra a un menor (personas menores de 18 años). Fuera del sistema legal, se hace referencia a estos archivos como Child Sexual Abuse Material (CSAM, materiales de abuso sexual Infantil), para reflejar con mayor precisión lo que tales imágenes muestran: la explotación y el abuso sexual de menores. Estas imágenes y videos no solo muestran el abuso y la explotación de las víctimas, sino que, además, cuando esos archivos se comparten en Internet, los niños sufren la revictimización que se perpetúa cada vez que se repiten y se vuelven a ver las imágenes de su abuso. En una encuesta reciente realizada por el Canadian Centre for Child Protection (Centro Canadiense para la Protección de los Niños), el 67 % de los sobrevivientes de CSAM dijeron que las imágenes los afectan de manera diferente al abuso en sí porque la distribución no termina nunca y las imágenes son permanentes.
Es importante recordar que los imágenes de abuso sexual infantil es mucho más que solo archivos de imágenes y videos. Si bien se ven y se transmiten en computadoras y a través de la tecnología, son representaciones de escenas de delitos reales, específicamente, delitos contra menores. El elemento humano, los niños en riesgo, siempre deben considerarse al hablar sobre este delito basado en un mundo de alta tecnología.
Lo inquietante de esta realidad es que las plataformas de Internet que usamos todos los días para conectarnos y compartir información con los demás ahora se utilizan para recopilar y propagar CSAM. Dado que se emplean plataformas tales como las redes sociales, los juegos en línea y el correo electrónico, el CSAM puede encontrarse prácticamente en cualquier lado.
¿Quiénes son las víctimas?
Hay escasa investigación respecto de las víctimas de las imágenes de abuso sexual infantil, aunque este es un campo de investigación de creciente interés a fin de entender mejor quiénes son los menores víctimas y quiénes son los agresores
En marzo de 2018, se publicaron dos estudios recientes sobre este tema. El primero es Production and Active Trading of Child Sexual Exploitation Images Depicting Identified Victims (Producción y comercialización activa de imágenes de explotación sexual infantil que muestran víctimas identificadas), el cual se basa en los datos recopilados por el Programa de Identificación de Víctimas Infantiles del NCMEC a lo largo del año 2014. El segundo es Towards a Global Indicator on Unidentified Victims in Child Sexual Exploitation Material (Hacia un indicador global sobre las víctimas no identificadas en el material de explotación sexual infantil), que se basa en datos del sistema global de Interpol.
A continuación, se presentan los datos principales que surgen de las investigaciones recientes:
- En la abrumadora mayoría de las imágenes de abuso sexual infantil, las víctimas son niñas.1
- Los niños prepubescentes son los que corren mayor riesgo de aparecer en CSAM.2
- Cuando las víctimas son varones, tiene probabilidades desproporcionadamente mayores de ser sujetos de imágenes o videos muy explícitos o flagrantes.
- Los varones menores que aparecen en CSAM son, en promedio, más jóvenes que las niñas víctimas y tienen más probabilidades que las niñas de no haber alcanzado aún la pubertad. .3
- En el caso de aquellos niños que son víctimas de engaños en línea4 , el 78 % de las denuncias involucraba a niñas y el 15 % a varones menores (en el 8 % de las denuncias, no se pudo determinar el género del menor).
1 Seto, M. C., Buckman, C., Dwyer, R. G., & Quayle, E. (2018, March 28). Production and Active Trading of Child Sexual Exploitation Images Depicting Identified Victims(Rep.). Retrieved April 1, 2018, http://www.missingkids.org/content/dam/pdfs/ncmec-analysis/Production%20and%20Active%20Trading%20of%20CSAM_FullReport_FINAL.pdf
2 Ibid
3 Ibid
4 Online enticement is a broad category of online exploitation, including sextortion, in which a child is being groomed to take sexually explicit images and/or ultimately meet face-to-face with someone for sexual purposes, or to engage in a sexual conversation online or, in some instances, to sell/trade the child’s sexual images.
5 ECPAT International and INTERPOL. (2018). Towards a global indicator on unidentified victims in child sexual exploitation material. Retrieved from http://www.ecpat.org/wp-content/uploads/2018/03/TOWARDS-A-GLOBAL-INDICATOR-ON-UNIDENTIFIED-VICTIMS-IN-CHILD-SEXUAL-EXPLOITATION-MATERIAL-Summary-Report.pdf
Los números
CyberTipline ha recibido más de
82 millones de informes
CVIP ha revisado más de
322 million
de imágenes/videos
Más der
19,100
víctimas han sido identificadas por la policía.
Lo que el NCMEC está haciendo al respecto
En 1998, con la ayuda de una donación privada y después de recibir un aumento en los informes relacionados con la explotación sexual de niños en línea, NCMEC creó CyberTipline. Dado que se trata de un mecanismo de denuncia centralizado, tanto el público en general como los proveedores de servicios electrónicos pueden informar sobre sospechas de explotación sexual infantil; por ejemplo:
- engaño en línea dirigido a menores para que realicen actos sexuales
- abuso sexual infantil extrafamiliar
- pornografía infantil
- turismo sexual infantil
- tráfico sexual infantil
- envío de materiales obscenos no solicitados a niños
- nombres de dominio engañosos
- palabras o imágenes digitales engañosas en Internet
Para ver definiciones y más información sobre estas categorías de denuncia, o para presentar una denuncia en CyberTipline, visite report.cybertip.org.
Como parte de nuestro trabajo para prevenir una mayor victimización de los niños y descubrir tendencias que pueden ayudar a prevenir estos delitos, el personal del NCMEC puede revisar el contenido informado a CyberTipline y luego los informes se ponen a disposición de las autoridades para su revisión independiente.
La legislación federal de Estados Unidos exige que los proveedores de servicios electrónicos (ESP, por sus siglas en inglés) con base en Estados Unidos denuncien a la CyberTipline del NCMEC los casos de aparente pornografía infantil que descubran en sus sistemas o servicios. El NCMEC trabaja estrechamente con los ESP en iniciativas voluntarias que muchas empresas eligen para disuadir y prevenir la proliferación de imágenes en línea de explotación sexual infantil.
Hasta la fecha, hay más de 1,400 empresas registradas en el NCMEC y, además de presentar denuncias al NCMEC, estas empresas también reciben avisos del NCMEC sobre sospechas de las imágenes de abuso sexual infantil (CSAI) en sus servidores, del que quizás no estuviesen enteradas.
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Special thanks to Videntifier.
El NCMEC también opera el Programa de Identificación de Víctimas Infantiles (CVIP, por sus siglas en inglés), que sirve como el depósito central de los Estados Unidos para la información relacionada con las víctimas infantiles representada en imágenes y videos de explotación sexual. El CVIP se lanzó en 2002 y tiene la doble misión de ayudar a identificar a las víctimas infantiles representadas en imágenes sexualmente explotadoras y proporcionar información relacionada con estas víctimas infantiles en procedimientos judiciales relacionados con delitos de pornografía infantil. El objetivo principal de CVIP es determinar qué niños fotografiados en imágenes y videos sexualmente explícitos permanecen sin identificar para que la policía pueda concentrarse en identificar y recuperar a estos niños que aún podrían estar en situaciones de abuso.
Cada vez más, los sobrevivientes de las imágenes de abuso sexual infantil se refieren al daño e impacto duraderos que les causa el hecho de que sus imágenes y videos sigan circulando en Internet. La falta de control tanto sobre la existencia de esos archivos como sobre su circulación dificulta la recuperación de los sobrevivientes.
Gracias a la nueva tecnología y el apoyo de socios con propósitos afines, el NCMEC trabaja con los ESP, así como con los niños y sus familias para identificar estas imágenes y marcarlas para que se eliminen de los servidores de los ESP. Esto empodera a las fuerzas del orden y a los defensores de los niños y permite que puedan decirles a los sobrevivientes que ES POSIBLE hacer algo para limitar la circulación de estos archivos en línea y para eliminarlos una vez marcados.
El NCMEC también brinda información para los sobrevivientes que quieren actuar rápidamente cuando se enteran de que sus imágenes y videos están en línea. Vea cómo contactar a los proveedores de Internet para denunciar archivos que están circulando en línea.
A aquellas familias de una víctima de explotación sexual, el NCMEC les proporciona intervención para casos de crisis y las pone en contacto con los profesionales adecuados que puedan brindarles consejería. Nuestro programa Team HOPE conecta a las familias con otras familias que han pasado por experiencias similares y que pueden brindarles contención y herramientas para sobrellevar estos momentos difíciles.
El NCMEC utiliza la experiencia que obtiene al operar CyberTipline y CVIP para crear y proporcionar programas de prevención y educación para padres y tutores, así como asistencia técnica y programas de educación para el público, las autoridades y otros profesionales que atienden a niños y niñas en relación con la explotación sexual infantil. El uso de datos de los informes reales de CyberTipline permite al NCMEC elaborar mensajes de divulgación que tengan en cuenta las tendencias en la explotación sexual de los niños y proporcionen recursos de prevención y educativos para ayudar a abordar estos problemas. Los programas de educación central del NCMEC incluyen NetSmartz y KidSmartz.
Conozca más sobre todos nuestros programas de educación y prevención aquí.
Casos de éxito
En diciembre de 2017, la CyberTipline® recibió una denuncia de un proveedor de servicios electrónicos registrado respecto de la transmisión de aparente pornografía infantil a través de su servicio de redes sociales. Como parte de su denuncia, este proveedor brindó información sobre el incidente, incluyendo una dirección de correo electrónico, el nombre en pantalla, imágenes de la aparente pornografía infantil y las direcciones IP asociadas con los archivos denunciados.
Un analista del NCMEC asignado a esta denuncia vio múltiples imágenes que consideró poco familiares, y un registro de chat que sugería que el usuario denunciado estaba persuadiendo al menor víctima para que abusara sexualmente de una niña pequeña que era su familiar. Al consultar la CyberTipline respecto de la información suministrada por el proveedor, surgió la información de que el usuario denunciado estaba asociado a otras tantas denuncias y que es posible que estuviera agresivamente intentando persuadir a múltiples niños para producir pornografía infantil. Las direcciones de correo electrónico proporcionadas por el proveedor se vinculaban con un perfil de redes sociales que incluía una ubicación y una posible afiliación a una pandilla. Según el contenido subido y el registro del chat, el personal del NCMEC le dio prioridad a la denuncia.
Ese mismo día, el proveedor de servicios electrónicos elevó una denuncia relacionada con el mismo usuario en la que alegaba que había usado varias cuentas para forzar a múltiples menores a producir imágenes de pornografía infantil. En varias ocasiones, el usuario denunciado pareció haber persuadido a los menores víctimas para que abusaran sexualmente de familiares de menor edad. El analista le agregó valor a esta denuncia, la conectó con otras denuncias relacionadas y la reclasificó para darle la prioridad más alta. La denuncia se puso a disposición de un grupo de trabajo sobre delitos de Internet contra los niños (Internet Crimes Against Children, ICAC) en los estados del Atlántico Medio, los cuales alertaron al departamento de policía local. El ICAC mantuvo informado al NCMEC sobre el caso y solicitó información adicional cuando fue necesaria. Como el usuario denunciado era ciudadano extranjero, el servicio de Investigaciones de Seguridad Nacional asistió para su arresto. Gracias al excelente trabajo de las fuerzas del orden, fue posible rescatar a 15 víctimas, incluyendo una niña de 2 años.
En enero de 2018, la CyberTipline recibió una denuncia de una persona del público general que alegaba que el individuo denunciado era adicto a la pornografía infantil. También se dijo que el usuario denunciado había sido empleado de una escuela y que era posible que siguiera teniendo acceso a los niños. La persona que proporcionó esa información dejó un nombre, un domicilio, un número de teléfono y el nombre de usuario del denunciado.
Un analista utilizó esa información para encontrar un perfil de redes sociales posiblemente relacionado con el caso y vinculado con el número de teléfono y el nombre de usuario proporcionados por la persona denunciante. El perfil tenía el mismo nombre que figuraba en la denuncia y permitía inferir que el usuario denunciado tenía acceso a múltiples niños. Según esa información, el analista elevó esta denuncia y la puso a disposición de las fuerzas del orden en un estado del sur. Gracias a una investigación conjunta de las fuerzas del orden de ese estado, se arrestó al usuario denunciado.
Se lo acusó de poseer “material con representación de una menor de identidad desconocida, de aproximadamente entre 8 y 10... participando de actividad sexual”. El usuario denunciado enfrenta cargos que incluyen un cargo por abuso deshonesto/exhibicionismo con una menor y tres cargos por explotación de una menor en 2do grado. Aparentemente, la víctima es una niña de la guardería donde trabajaba el acusado.